¿Qué es?
La retina es la capa posterior del ojo y transforma la luz y las imágenes que entran en el ojo en señales nerviosas que son enviadas al cerebro.
El desprendimiento de retina se produce cuando se separa la retina neurosensorial (capa donde se encuentran las células sensibles a la luz) del epitelio pigmentario (capa externa), acumulándose líquido en el espacio que queda entre ambas. Eso provoca que la retina neurosensorial se desprenda y quede sin nutrición y sin riego sanguíneo.
Es una enfermedad grave del ojo, que puede producir una pérdida total de la visión si no se trata a tiempo. Puede ocurrir a cualquier edad, aunque normalmente suele darse en la edad adulta. En algunos casos poco frecuentes, el desprendimiento de retina es una enfermedad hereditaria y puede presentarse incluso en niños.
El Desprendimiento de Retina afecta a una de cada 10.000 personas al año.
¿Cuáles son las causas?
La mayoría de desprendimientos de retina están causados por la presencia de uno o varios desgarros o agujeros retinianos.
El envejecimiento normal puede producir un adelgazamiento y deterioro retiniano. Pero, con mayor frecuencia, la causa del deterioro y de los desgarros retinianos es la retracción del cuerpo vítreo, el líquido gelatinoso que rellena el interior del ojo. El vítreo está adherido a la retina por varios lugares de la pared posterior del ojo. Si el vítreo se retrae puede arrastrar un fragmento de la retina.
Los factores de riesgo son:
- Miopía elevada
- Antecedentes personales o familiares de desprendimiento de retina
- Historial de contusión ocular, traumatismo o cirugía de catarata complicada
- Otras enfermedades oculares como tumores, inflamaciones severas o complicaciones de la diabetes.
- Medicamentos para el glaucoma que hacen que la pupila sea más pequeña (como la pilocarpina)
- Tener zonas débiles en la retina (detectadas por tu oftalmólogo en un examen)
Síntomas
Un desprendimiento de retina debe ser examinado por el oftalmólogo de inmediato. De lo contrario, puede perder la visión en ese ojo.
Al no causar dolor, y en muchos casos, no ir acompañado al inicio de pérdida de visión, es importante estar alerta ante estos síntomas, aunque sean aparentemente inofensivos:
- Visión de moscas volantes (miodesopsias) de nueva aparición al mismo tiempo. Estas se pueden ver como manchas, líneas o telarañas en el campo de visión y se mueven al mover el ojo.
- Visión de destellos luminosos (fotopsias)
Es un síntoma de mayor importancia, que refleja la existencia de tracciones sobre la retina. Suele aparecer cuando ya se ha producido la rotura
- Visión de una cortina oscura o sombra que cae por alguna zona del campo visual, es un síntoma característico. Se produce cuando ya existe un desprendimiento de retina, por lo que la consulta con un oftalmólogo debe ser inmediata
- Visión de imágenes distorsionadas, ondulantes o acuosas,
- Visión central borrosa con una disminución significativa de la agudeza visual. Este síntoma aparece si hay afectación central de la retina (mácula).
- Pérdida total de visión en un ojo, si éste se desarrolla rápidamente.
¿Cuándo acudir a tu oftalmólogo en Terrassa?
La aparición súbita de moscas volantes o un aumento brusco de las ya existentes, especialmente la visión los destellos luminosos, u otros síntomas antes descritos, ya nos avisa de un posible desgarro o rotura de la retina, síntomas que deben ser consultados rápidamente con su oftalmólogo del Institut Ocular del Vallès.
¿Cómo se trata el desprendimiento de retina?
El tratamiento del desprendimiento de retina se trata con diferentes técnicas, casi siempre quirúrgicas, en función del grado y de la fase:
- Fotocoagulación con láser: En una fase inicial, si la retina está desgarrada y aún no se ha iniciado el Desprendimiento de Retina, éste se puede prevenir mediante un tratamiento temprano llamado fotocoagulación retiniana. Mediante el láser, se causan quemaduras controladas alrededor de la zona desprendida. Estas quemaduras acaban por cicatrizar y sellan la rotura retiniana, evitando que el humor vítreo se infiltre entre ambas capas
- Vitrectomía: Consiste en la extracción del humor vítreo del interior del ojo que está traccionando la retina y reemplazarlo por una solución salina o por una burbuja de aire, gas o aceite de silicona. La burbuja empuja la retina y la coloca en su lugar para que pueda sanar adecuadamente. Posteriormente, se reaplica la retina desde dentro utilizando líquidos pesados y realizando láser desde el interior del ojo mediante fotocoagulación o criocoagulación, generar un estímulo cicatricial y así conseguir la adhesión de la retina neurosensorial al epitelio pigmentario.
- Cirugía escleral: Consiste en la colocación sobre la esclera de una banda de silicona, a modo de “cinturón” para mantener una presión externa sobre el globo ocular, que facilite el cierre de la rotura en la retina.
Es muy importante realizar una cirugía precoz ya que, si tarda más de una semana, la posibilidad de recuperar la visión es mucho menor.
Más del 90% de los desprendimientos de retina se pueden curar, la mayoría en una sola operación, pero algunos requieren varias intervenciones.
¿Cómo prevenirlo?
Es importante realizar revisiones periódicas, como mínimo una vez al año, particularmente en población con factores de riesgo.
También es esencial revisar la retina del ojo contralateral de los pacientes con antecedentes personales de desprendimiento de retina, para poder detectar lesiones periféricas de riesgo y tratarlas preventivamente, antes de que desarrollen dicha enfermedad.
Es aconsejable realizar un tratamiento preventivo con láser cuando existen desgarros de la retina aunque aún no hayan provocado un desprendimiento.
El tratamiento preventivo con láser también puede ser útil para pacientes de alto riesgo, con lesiones degenerativas retinianas periféricas, que puedan acabar en una rotura.
Ante la aparición de signos de alarma como: aumento de visión de manchas, destellos, sombras o pérdida visual repentina y progresiva, acuda a su oftalmólogo de urgencias del Institut Ocular del Vallès.